La gráfica de la semana: URUGUAY Y ARGENTINA:DOS MODELOS CON RESULTADOS MUY DIFERENTES

La reciente información del Banco Central del Uruguay (BCU) da cuenta de un crecimiento de la actividad económica de nuestro país de 1,6% en 2018. Es un resultado inferior al logrado en 2017, que fue de 2,5%, pero que nos mantiene alejado de la recesión. No es lo que ocurre en los países vecinos: en Argentina la actividad económica disminuyó en 2,5% al cierre de 2018, y Brasil crece solamente 1,1%, igual que en 2017.

El presidente argentino Mauricio Macri asumió en 2015 y de inmediato comenzó a aplicar políticas de ajuste neoliberal que sumieron a su país en la inestabilidad que se observa en el gráfico, con resultados escalofriantes: dos habitantes por minuto pasan a ser pobres y cada 73 segundos uno cae en la indigencia, sumando hoy 13 millones de personas en la pobreza y casi 3 millones sin ingresos suficientes para alimentarse.

De este lado del Rio de la Plata, Tabaré Vázquez en el mismo período continuó las políticas progresistas iniciadas en 2005, con resultados muy diferentes: completó en 2018 un ciclo de crecimiento de 13 años, aumentando la producción en 6,4% desde 2015 (promedio anual 1,6%), disminuyendo la pobreza de 9,7% a 8,1% (52.300 pobres menos) y la indigencia de 0,3% a 0,1% (6.900 indigentes menos). A su vez la desigualdad en la distribución del ingreso medida por el índice de Gini permaneció en 0,38 (en 2015 era de 0,381).

El 27 de octubre de 2019, la ciudadanía argentina y la uruguaya decidirán sobre la continuidad de sus gobiernos. La oferta electoral de la oposición mayoritaria en Uruguay (que festejó el triunfo de “Cambiemos”) tiene en sus programas, y a veces ocultos en su perfil ideológico, casi todos los componentes del modelo aplicado por Macri en Argentina. Los resultados están a la vista, y las consecuencias de un retorno neoliberal en nuestro país pueden ser catastróficas.