LA GRÁFICA DE LA SEMANA: MORTALIDAD INFANTIL EN URUGUAY: MÍNIMO HISTÓRICO CUMPLE CON LOS OBJETIVOS D

La Tasa de Mortalidad Infantil (TMI) se calcula como el cociente entre el número de fallecimientos de menores de 1 año ocurridos durante un año sobre el total de nacidos vivos en el mismo período. Es un indicador complejo que resume información acerca de la calidad de la infraestructura sanitaria, las condiciones ambientales, sociales y económicas de un país. Este indicador se encuentra estrechamente relacionado con el índice de desarrollo humano. Es posible afirmar que las reformas impulsadas durante el período frenteamplista, ligadas a los hogares más vulnerables, con mayor número de niños y adolescentes, y específicamente al sistema nacional de salud y su universalización de calidad, expliquen estos resultados.

De acuerdo con lo informado por el Ministerio de Salud Pública el 25 de marzo pasado (msp.gub.uy), el año pasado se registraron 11 fallecimientos infantiles menos que en 2017, cuando se verificó una tasa de 6,6 muertes cada 1.000 nacidos vivos, el menor guarismo desde que se lleva esa estadística en Uruguay. En el 2018 fallecieron 269 niños, 11 menos que en 2017. El valor se calcula tomando en cuenta que se registraron 2.897 nacimientos menos.

La gráfica que muestra la evolución de tan importante indicador, nos indica que desciende a lo largo del período pos-dictatorial, con ciertos matices diferenciales importantes. Durante el período más duro del neoliberalismo, en que los gastos públicos fueron duramente ajustados, la variación fue muy reducida (de 21,2 a 19,6 entre los años 1989 y 1995) alternándose aumentos y reducciones. Luego la crisis 1999-2003, período en que la TMI aumenta desde 14,4 a 15,1 muertes cada 1.000 nacidos vivos.

Desde 2004 hasta 2018, con la excepción de los años 2011-12, la reducción de la mortalidad infantil ha sido muy importante (de 13.2 a 6,6), con un aumento del gasto público en salud de 170%, cumpliendo así el compromiso realizado con los Objetivos del Milenio de reducir en dos tercios el registro de 1990.